Hibernando

Nada como sentir tus dedos entrelazados en los míos, tú y yo cogidos de la mano. Ahora despierto y veo que me has soltado. Dices que nos une todavía el amor, pero ya no se desliza por nuestra piel. Quizá esté hibernando para resurgir en una nueva temporada. Quiero pensar que despertaremos deseosos de compartirnos como antaño. O tal vez, ese es mi sueño, y en realidad únicamente vuelva a llover sobre mojado. No lo sé, por el momento me aferro a no despertar.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *