Cuando esto acabe

Imagen: Pixabay

Lo primero que haré, cuando todo esto acabe, será conversar con el mar y pedirle perdón por todo el desamor que llevo acumulado, sin más poesía que mirar al cielo y buscar alguna que otra gaviota.

Amor en Roma

Imagen: Pixabay

Sus ojos la encontraron desnuda, yaciendo sobre el lujoso lecho de sábanas de seda, sodomizada por la fuerza con la que su dueño le embestía por detrás, sin piedad alguna. El esclavo permaneció allí quieto, ante la orden de su dómine, aguantando con sus manos una toalla limpia y un enorme jarrón lleno de agua, pero esa impasividad que se veía en su rostro tan sólo era una fría máscara de cerámica con la que cubría su verdadero estado de ánimo. Por dentro se sentía afligido, destrozado al ver que su amada era obligada a dar disfrute al amo, un auténtico cretino procedente de la mismísima Roma.

Vico sabía que aquella sumisión sólo se trataba de una crueldad carnal a la que obligaban de vez en cuando a la joven. Aun así, aquellos encuentros de sudor y jadeos le pateaban de forma muy dura su corazón enamorado. Quizá podría haber intentado librar a su querida de las asquerosas manos de su señor. No le faltaba valor para hacerlo, tampoco le hubiera importado morir por tal motivo, pero Nerea le pidió por favor que no lo intentara. En una ocasión intermedió por ella y a cambio recibió veinte latigazos: uno por cada año de su vida.

Justo antes de escuchar un grave y varonil grito, Vico y Nerea quedaron enlazados unos segundos por sus miradas. Bastaron cuatro ojos privados de libertad para consolarse y empatizar con la difícil situación de sentirse menospreciado, por haber nacido siendo hijos de esclavos. El señor de la casa solía decir que la plebe tenía la misma sangre que las ratas, pero por lo visto a él no le importaba aparearse con sus siervas. El amo terminó con desprecio y ordenó a su súbdita que marchara de inmediato de su cama. Ella lo hizo con mucho gusto, cuando acababa la tormenta era el único momento en el que encontraba libertad. Antes de salir de allí se cruzó de nuevo con la mirada de Vico; ella se sintió un despojo, agachó la cabeza y se marchó desnuda, desbordando tristeza con cada uno de sus pasos.

«¡Puta esclava, me ha puesto perdido con su jodido sudor! ¡Por Neptuno, ve a por más agua!», le ordenó a Vico al no sentirse limpio del todo.

La encontró justo al lado de la fuente, cuando se disponía a rellenar el cántaro. Nerea, aunque en apariencia lucía su piel impoluta, no paraba de frotarse con fuerza. Todavía podía sentir el hedor de su amo sobre la nuca. Vico la miró con la misma ternura que un enamorado intenta atrapar la luna con sus dedos. Unieron de nuevo sus miradas.

El hombre abrió la boca para pronunciar sus primeras palabras del día. Al amo le gustaba que sus esclavos fueran silenciosos, por eso amenazaba con cortar la lengua a quien se atreviera a hablar sin su permiso. «¿Estás bien?», le dijo a ella, pensando en lo estúpida que había sido su pregunta. «Me duele, pero el alma», contestó Nerea, mientras bajaba su mirada al suelo y sin parar de limpiarse. «Imagino tu dolor», respondió él con su cara más triste, a punto de dar vida a una lágrima. «¿De verdad?», quiso saber la esclava. Afirmó con la cabeza. Luego dejó el jarrón a un lado y se acercó hasta ella. No era la primera vez que veía a la mujer de sus sueños desnuda, aunque jamás había estado tan cerca de ella. En esta ocasión llegó a notar el calor de su cuerpo, cosa que le gustó.

«Yo también sufro cuando el amo pone sus manos en ti, cuando te posee con sus posturas y palabras infames. Mi corazón se destroza cada vez que la angustia se aloja en tu rostro y sólo es capaz de reflejar infelicidad. No soporto ver que la belleza de tus ojos se derrocha con las oscuras noches de alcoba a las que te someten», la cogió de la mano y acarició con mucha delicadeza su piel. «¿Por qué dices todo esto, Vico?», se interesó ella, a lo que él respondió: «Porque te amo, mi señora. Lo hago desde que los dioses me susurraron al oído que debía conformarme con ser un esclavo más en la casa de los Piaggio. Yo no me resigno a ser un mero hombre sin libertad, porque tengo derecho a amar, e intentar tener la fortuna de ser correspondido. Yo te quiero, Nerea. Sí, soy un hombre sin futuro, pero con un corazón puro que siempre vela por ti».

Por un instante quedaron en silencio. Ella cogió la robusta mano derecha de Vico y la puso en su pecho, todavía desnudo. «¿Lo sientes palpitar?», preguntó Nerea. «Sí… ¿Y ahora qué?», dijo él un tanto confuso. «Ahora, al fin me siento libre y amada», sonrió.

Sus lenguas se unieron saboreando el eterno y amargo recorrido del amor de unos esclavos en tierras romanas, con la esperanza de algún día poder respirar la auténtica libertad. Por el momento, abrazados, sintiéndose el uno al otro, creían tener más cerca el final de ese complicado camino. Sí, sus cuerpos estaban presos, pero sus corazones podían viajar más allá, eran libres de amar. Eso, nadie podía quitárselo a ninguno de los dos.

Penumbras – Vídeo

Hoy, con ayuda de Nora, hablamos de «Penumbras«, una antología de relatos de terror. Se editó y publicó en el año 2019, por Onyx Editorial. Se trata de un libro solidario, dado que todos los beneficios de los autores van destinados a la ONG DELWENDE. ¿Quieres saber más? ¡No te pierdas el vídeo!

Hashtags

Imagen: Pixabay

El viejo Blas llegó montado en su vespino de color rojo. Llevaba un cajón cargado de patatas de su propia cosecha. Aunque estaba jubilado, jamás renegó de la buena costumbre de #madrugar. Se levantó temprano, y después de beberse un café, tocado con la simpatía de Terry, acudió hasta su granja para realizar las tareas cotidianas: mimar a sus animales para obtener la mejor leche.

Pero esa mañana hizo algo nuevo. Hincó las rodillas en el suelo y se puso al lado de Marina, su cabra más fotogénica. Luego pulsó el botón rojo del móvil, y envió un #selfie muy simpático  a su nieta: «¡Saludos desde la Moncloa!», escribió con sorna el abuelo.

Blas no tardó en recibir una respuesta: «Abu stas peor qla kbra! xD <3».  El hombre se alegró al imaginar la enorme sonrisa. Se notó #melancólico por tenerla muy lejos, pero satisfecho al encontrarla más cerca gracias al móvil. Se sintió un #crack, aunque en realidad no llegó a descifrar todo el mensaje.

Demasiado amor

—Antes de morir dijo que le dolía el pecho.
—¿Un posible infarto?
—No, quizá fue algo mucho más sencillo.
—¿Qué?
Demasiado amor para un hombre tan menudo.

Hoja en blanco

Imagen: Google

—¡Hazme un poema! —Me suplicó; fui tan torpe que dejé la página en blanco.

Entrevista a Joakin Iriarte

Joakin es un tío con una mirada penetrante, cautivadora. Quizá por eso se le da muy bien captar instantes con su cámara, creando con ello sensaciones y sentimientos que despiertan el alma.  Para mí es un poeta moderno, en el sentido de utilizar su cámara para escribir poesía, y a su vez vintage; los textos que acompañan a las imágenes delatan su interior más tierno, humano y romántico; un «fotopoeta» que no debemos perder de vista.

  1. Teniendo tu primera obra en las manos, es inevitable esta pregunta. ¿Por qué el título de Palabras Huérfanas?

Siempre he pensado y sentido como escritor, que todas las palabras son huérfanas hasta que encuentran una mirada que las siente como propias. También es como defino a aquellas palabras que no son pronunciadas o escritas y que se quedan en nuestro interior como formando un nudo; un último adiós silenciado, una declaración de amor no declarada o un perdona no llegado a pronunciar.

  1. En tu obra se puede observar mucho entorno rural, y aunque  juegas con el blanco y negro en las fotografías, se puede apreciar a la perfección el verde, el azul, el gris… ¿Le haces el amor a la naturaleza? ¿O ella te lo hace a ti?

Rotundamente ella, yo me siento en y ante la naturaleza como un invitado que  observa y asiste  maravillado a lo que le rodea, de ese acto surgen palabras e imágenes, que se convierten en un pequeño homenaje a la naturaleza como musa.

  1. ¿Escribes desde hace mucho tiempo? ¿Cuándo te surgió la idea de mezclar versos e imágenes? Personalmente me parece un trabajo muy creativo, a la vez que bonito.

Escribo desde los 15 años. La idea surgió de la necesidad, de la urgencia de comunicar sentimientos y emociones tanto a través de las palabras como de  la fotografía. Mi reto y mi ilusión como creador es que mis imágenes sean poemas sin palabras.

  1. Esta semana acabas de presentar tu segundo trabajo en Castellón, en él hablas de la niebla. ¿En qué sentido? ¿Qué diferencia hay con tu primera obra?

Hablo de la niebla casi como de una entidad viva, mágica y misteriosa que envuelve todo; a la gente y su entorno, a las emociones, a los paisajes. La niebla provoca miedo y respeto, a la vez que una fascinación que sirve para expresar emociones, sensaciones que las personas experimentan bajo su influjo.

La diferencia principal estriba en que en el segundo, los poemas giran en torno a la niebla y a un Valle, el Valle de Baztan, cuyos paisajes se ven en muchas ocasiones envueltos por un halo de misterio y melancolía, al ser cubiertos por la niebla. Mientras que el primero, es más un conjunto de poemas que reflejan distintas situaciones y estados anímicos.

  1. Los poetas siempre han tenido fama de hablar a la sociedad con sus versos. ¿Intentas transmitir al mundo algún tipo de mensaje en tus obras?

Quisiera que a través de los versos se pudiera crear un puente invisible entre poeta y lector, en el que las emociones son compartidas como un acto de complicidad muy íntima. Me gustaría mostrar que es posible otra manera de ver el mundo y de actuar en él; mis poemas y mis fotografías son mi manera de amar el mundo que me rodea.

  1. Mirando las fotografías que acompañan a tus poemas, se pueden apreciar imágenes de una enorme belleza. ¿Has participado en alguna exposición?

Dos hasta la fecha, la primera en el 2012 en el Café dels Artistes de Castellón y las segunda en el 2013 en Le Meduse en el Grao de Castellón.

  1. ¿Hay algún artista (poeta, fotógrafo, etc…) en el que te sientas identificado?

Poetas: Fernando Pessoa, Pablo Neruda, Walt Whitman, Charles Bukowsky y Benedetti, Javier Irazoki, Hasier Larretxea

Fotógrafos: Me gustaría mostrar mi respeto por autores no tan  famosos ni reconocidos pero cuyo trabajo admiro profundamente: Brett Walker, Jean-Fabien Leclanche y Juan Lamerinhas. Y de las leyendas, me quedaría con Man Ray y Helmut Newton…

Músicos: Tom Waits, Nick Cave, Leonard Cohen, Norah Jones, Metallica, Pearl Jam, Marea, U2, Lemonheads, Bauhaus, The Cure, The Cult, Rosana, Radio Futura…, soy muy ecléctico en mis gustos musicales.

Pintura: Goya, Dali, Van Gogh…

  1. Háblanos de tus próximos proyectos.

Me gustaría hacer una exposición de retratos y estoy trabajando en un tercer libro en el cual deseo que haya además de mis imágenes habituales, retratos de gente amiga y anónima.

  1. Vivimos una sociedad informatizada y “enredada” por la tecnología. ¿Tienes algún blog? ¿Dónde podemos seguirte o comprar tus libros?

He de confesarme muy torpe con las nuevas tecnologías, no me gusta mucho abusar de ellas. No tengo por ahora ningún blog, pero no descarto acabar creando uno… mi segundo libro BAZTAN Una mirada a través de la niebla se puede adquirir en blurb.com, y poniéndose en contacto conmigo vía mail iokin_iri@yahoo.es, Facebook…

Antes de terminar, permíteme retarte a un juego. Te voy a decir una serie de palabras y tú me respondes de forma rápida lo que te sugiere cada una de ellas.

  • Corazón: Un inconsciente que algunas veces tiene razón.
  • NocheEl lugar donde mis silencios juegan con los suyos.
  • Círculo: Una bonita manera de dibujar el Sol o la Luna.
  • CrisisUna mala excusa para hacer las cosas peor.
  • Castellón: Por el amor de una mujer…
  • AyerUn lugar al que siempre vuelvo cuando  mis versos llaman a la puerta del recuerdo.

Muchas gracias por tu tiempo, Joakin.

Un placer como siempre, Javier.